Mi trabajo muestra cómo las chicas, después de comer comida basura, siguen sin ser obesas debido a la actividad física que realizan sin saberlo. Saltarse el desayuno a toda prisa para llegar a los colegios lejanos también contribuye a que no aumenten de peso a pesar de consumir comida basura fuera de casa. Los sujetos realizaron esta actividad sin ser conscientes del ejercicio real que hacían sin saberlo.
Madre de un niño de 7 años, mi pasión por la salud y la nutrición me ha llevado a cursar un máster en dietética y nutrición alimentaria y a desempeñar el papel de educadora en la universidad Aqsa. Mi objetivo es educar especialmente a las mujeres de las zonas rurales de la India sobre su cuerpo y sus necesidades nutricionales. Esta investigación es un pequeño paso en esa dirección.